Rafael Nadal, segundo favorito, arrolló al serbio de 19 años Novak Djokovic, por 6-4, 6-4 y abandono por lesión, para colarse en las semifinales de Roland Garros. Su rival, el croata Ivan Ljubicic. "Prefiero ganar en tres sets, es una pena que él tuviera que retirarse, pero ya estaba bastante encarrilado el partido. Será positivo para las semifinales, porque estaré más descansado", comentó el español.
Pese a todo, el serbio comentó con cierta altanería, que estaba seguro de tener el mando del partido.
"Todo el mundo dice que es el mejor del mundo en esta superficie, pero yo digo que no es invencible", argumentó.
La fortaleza de Nadal desde el fondo de la pista y su experiencia en rondas finales fueron superiores a la ilusión de Djokovic.
Rafa se apuntó el primer set en 47 minutos. Tras este parcial, la voluntad de Djokovic pareció resquebrajarse aunque soportó un 6-4, en el que necesitó asistencia médica.
El serbio aguantó hasta que no pudo más
Fue al final de este segundo set, cuando el serbio decidió que no podía soportar más castigo y decidió abandonar. Su espalda le estaba matando y era peligroso continuar.
"Me ha sorprendido porque aunque hacia gestos que estaba mal, sólo los hacía cuando perdía puntos", dijo sobre la retirada.
"Y sacaba a 205 kilómetros por hora. No quiero dudar en ningún momento de que estaba mal".
La victoria, en menos tiempo de lo esperado, supone una buena medicina para recuperar todo el esfuerzo que ha realizado en partidos anteriores para sumar hasta hoy 14 horas y 9 minutos de brega en pos de su segundo título en París.
"Llevo mucho tiempo en la pista", dijo Nadal al recordar los largos encuentros diputados anteriormente. "Cuando lo he necesitado sí que me he animado. Tampoco hay por qué derrochar energía".
"Los saltos en este tipo de partidos al final pueden ser perjudiciales. Hay que saber medirlos y controlarse. Un poquito de tensión es buena, igual que el año pasado aquí. Yo estaba más nervioso el año pasado que éste", comentó Nadal al final del encuentro.
Ljubicic, penúltimo obstáculo
El croata Ivan Ljubicic, cuarto cabeza de serie, tampoco se desgastó demasiado y, con una victoria sobre el francés Julien Bennetau por 6-2, 6-2 y 6-3, se clasificó para disputar las semifinales de Roland Garros, por primera vez en su carrera.
Sobre Ljubicic, su rival en semifinales, lo primero que le vino a la memoria fue su victoria sobre el croata en la final del Masters Series de Madrid.
"Hay muchos buenos recuerdos en mi carrera, pero ganar en casa a Ljubicic en Madrid, es uno de los inolvidables. Estaba abajo con dos sets a cero y la reacción del público fue espectacular".
Su mejor momento
"Creo que llego en mi mejor momento, tenístico y físico, de cara al domingo", dijo si vence a Ljubicic.
Y respecto a la semifinal Nalbandian-Federer, dio como favorito al suizo, pero con dudas.
"Será un partido duro, adivino no soy pero sé que Nalbandian va a restar duro, y será igualadillo. Doy favorito a Fededer porque está acostumbrado a ganar, y porque últimamente lo está haciendo muy bien en tierra, pero no pondría la mano en el fuego".
"Doy favorito a Fededer porque está acostumbrado a ganar, y porque últimamente lo está haciendo muy bien en tierra, pero no pondría la mano en el fuego".
"Yo me siento el dos del mundo, él tiene siete mil puntos", añadió al hablar de Federer, "nadie en la historia tuvo tantos puntos ni había marcado tanta diferencia con el dos del mundo. Sería tonto sentirme el uno".
Vía | 20Minutos.es

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